Escribe: Heber A. González
Periodista
Está más que claro que tener la pelota, las mejores situaciones, ser claramente superior la mayor parte del juego no te hace ganador de un partido. Y eso ocurrió el domingo en Maldonado cuando River Plate terminó empatando a 0 con el local, Deportivo Maldonado. Las mejores intenciones y chances tuvieron camiseta celeste en la tarde esteña.
El primer tiempo nos tuvo como grandes protagonistas de acuerdo incluso a lo que dicen las estadística. Por ejemplo Nápoli combina con Bonifazi y remata apenas desviado; el “Ojito” desborda por su lateral, mete un centro bárbaro al área, la baja Borbas para Arezo que se encuentra con el golero Cardozo que manda al tiro de esquina. A los 34’ Boggio casi convierte de córner y unos minutos después es Matías Arezo que mediante un tiro libre obliga al arquero Cardozo que la saca al córner. Todo esto en el primer tiempo del lado darsenero. Del otro lado una media vuelta de Batista, al comenzar el partido, que Ichazo resuelve a su favor y nada más. Así se termina esa primera mitad del partido.
En el complemento River bajó un poco el rendimiento y las revoluciones y eso permitió que el local amenazara con alguna acción de peligro aunque a poco de empezar Arezo lideró una contra que no definió bien pero pudo ser gol. Luego, ese afloje de River en el campo le dio la chance a Darias que remató apenas afuera y unos minutos después a Ramos que la tomó de volea y también remató desviado. En ese período costó retomar las riendas del partido y en el local se volvieron peligrosas las subidas por el lateral de Toledo que mostró deficiencias a la hora de concretar. Cuando el darsenero pudo ofender lo hizo a través de un envío de Boggio para Arezo que no pudo discernir con efectividad y esa jugada se convirtió en un entrevero sin consecuencias.
Asi se nos fue el partido. Con un empate en 0 tanto que es castigo para River y un premio para el local. Hicimos los méritos para un mejor resultado pero no se pudo obtener. Siguen quedando imágenes imborrables y situaciones que pintan el futuro. Por ejemplo el debut en primera de Joaco Lavega con 16 años, la firmeza de Borbas, Galletto y Neris dentro del campo y siempre la convicción que hay material en juveniles que siguen pidiendo cancha.
Ahora hay otro viaje al interior pues jugamos ante Cerro Largo en el Ubilla el domingo a las 17.15. No es fácil, es de los equipos más difíciles en su cancha así que la mentalización y concentración para ese encuentro tiene que ser superior. Como siempre, confiamos en nuestra banda de técnicos y jugadores, HACIENDO EL CAMINO DE SIEMPRE.