Escribe: Heber Américo González.
Periodista.
El partido ante Liverpool, que terminó con derrota 1 a 0, tiene dos formas de verse. Por un lado está la herida en la ilusión, los darseneros queremos un título y ésta blanda de jugadores y técnicos nos acercó a la obtención del sueño. Y por otro lado está la realidad. Y ésta dice que no estamos mal. Perdimos sí pero no estamos mal. Hay funcionamiento, hay equipo, hay futuro y por tanto las esperanzas están intactas. ¿Qué es lo que falta? Un poco más de maduración. Pero el camino es éste, sin dudas, y más acá o más allá nos llevará al título. En el encuentro ante el negriazul tuvimos 15’ de desconcierto en el primer tiempo y luego tomamos rienda de las acciones. Igual que en la segunda parte en la que también carecimos de orden por algunos minutos hasta que nuevamente el darsenero fue el protagonista.
En la primera parte juego de un lado a otro, muchas veces, sin pasar por el mediocampo. Cuando Urretavizcaya tuvo una chance inmejorable ante el pase de Maxi Pereira iban 15’ y a partir de allí el trámite se hizo parejo pero sin acciones de peligro sobre los arcos. Sin predominancia de uno sobre otro pero con una leve inclinación hacia el dueño de casa.
Para el inicio del segundo tiempo, como está escrito, fue Liverpool quién obtuvo el rédito de su juego pues un centro de Vecino encontró a Rodríguez sólo en el medio del área para poner el 1 a 0 para la visita. A partir de allí, igual que en la primera parte, el darsenero se tiró sobre el arco de Britos y arrinconó al negriazul haciendo pasar zozobra a la defensa. Borbas de cabeza una vez, Clar con un remate y Maxi Pereira de cabeza, lo mismo que Salaberry, fueron todas aproximaciones que encendieronla ilusión del gol de River. Pero una vez más, como tantas otras, la falta de eficacia en el arco adversario nos jugó en contra y perdimos ese partido.
Nos quedamos con el desencanto lógico de una derrota pero con la convicción, seria y responsable, que el camino elegido es el correcto. Será sin dudas el que nos llevará por los mejores logros. No vale dramatizar ni hacer leña del árbol caído. Los errores son cada vez menos y, a veces, provocan dolor. Nos quedan Peñarol en su casa y Torque en el Saroldi. La idea será cerrar el torneo con dos victorias más que nos acerquen a las primeras posiciones.
2 comentarios.
«un poco mas de maduración» es lo que le faltaría a River Plate. Promedio de edad arriba de los 30 años. Un poco mas de maduración al Chori-Ichazo-Maxi Pereira,etc. Dentro de poco juegan al Papi-fútbol.
Un paso adelante siempre se José Raul Ellauri Enriquez. Me iba a referir a ese tema de » le falta un poco más de maduración» pregunto al vino tinto al whisky al pernil de cerdo?
Pereira 38
Castro 38
Ischazo 30
G.Viera 35
Salaverry 35
Herrera 33
Urretavizcaya 32
Affonso 30
Clar 28
Montiel 27
Cristobal 26
Lopez 26
Brunelli 24
Chopitea 23
Ramirez 23
Alfonso 22
Napoli 22
El resto del plantel en edad de menos de 21 años es relleno para bajar el promedio de edad total y para dejar contentos a socios, hinchas, representantes y padres y los dirigentes y el entrenador paea la tribuna partidaria politica «hay un proyecto de futuro con las formativas». Lo agracadi del tema que de los jugadores de la lista una gran mayoría hacia de suplentes [cuando River los fue a buscar] o apenas habían jugado 2 partidos en sus clubes del exterior. Y no me olvido que el entrenador haciendo humo pero no brasa para el asado paseo por todo medio periodístico que HABIA HABLADO CON PO..LEN..TA con tuco por favor !!!!. El partido contra Peñarol ES EL PARTIDO no hay dos opciones, al menos para clasificar en una Copita Internacional y mostrar a los inmaduros y algunos botijas. El Clausura depende de ganar los dos partidos que quedan [no veo mucho temple, si «experiencia de muchos con titulos en los»equipos grandes»]y esperar que Nacional pierda contra Cerrito [permitaseme esbozar una sonrisa]. La chance ya no depende exclusivamente de River sino de otros. Esa chance la perdimos varios partidos atrás. De todas maneras los partidos son de 100′ y 11 contra 11 en la cancha.